El Metalero Mamón

El Metalero de “Amor Ciego”, conocido por sus familiares como Andrés Marín, fue uno de los personajes más bizarros del dating show.

De estatura pequeña, pálido, pelo largo con frizz y ponchera abultada, no dudaba en ponerse sus poleras de Megadeth y Metallica dentro del encierro. Bueno pal cahuín y echar la foca, Andrés, se caracterizó por ser un tanto mamón, en contraposición a su imagen ruda.

Le llegaba al hombro a Cari. Cuando tenían citas, pobrecita ella, no podía usar tacos.

Pero esto no es nada ante lo que se fue descubriendo de a poco mediante el programa sumaba días de encierro: Metalero le temía a los bichos, pero fóbicamente… O sea, sufría de entomofobia. Esto se supo cuando uno de los galanes advirtió al resto de los participantes sobre una araña de rincón que habría encontrado en la pieza. Aquí, y frente los otros chilenos que fueron dispuestos a entregar su corazón por Bastías, salió gritando de la sala.

Pero esto no siguió. Andrés Marín le exigió a producción se revisase la casa claustro pues su problema era tal que no podría controlar su ansiedad.

El resto de los participantes no podía creerlo.

Su imagen tocó fondo cuando en una de las tantas salidas grupales con Cari, en el capítulo del desembarque de los modelos al reallity, Metalero Marín empezó a gritar por las hormigas que sentía en su cuerpo.

Como si esto no fuera poco, una vez expulsado del dating show, "Sálvese Quien Pueda" (SQP), programa que dicta cátedra a la farándula chilena todos los días en CHV, fue a verlo a su casa.

Todavía recuerdo el gran momento que viví gracias a esas imágenes: la inocente madre de Metalero abrió las puertas de su hogar para mostrarnos a todos la pieza del bichofóbico. Grata sorpresa se llevaron todos los chilenos al ver una treintena de peluches ordenaditos sobre su cama y una serie de decorados en rosas y celestes por toda su habitación… ¡! xD

Tras los pasos de la dama

Luego de la megaexposición mediática que vivió Cari y sus galanes, ¿qué será de ella hoy?

Todos sabemos que luego de descartar hombre por hombre e ilusión por ilusión, Bastías finalmente eligió a Edmundo. Definición cuestionada hasta el día de hoy en su honestidad amorosa: ¿lo eligió por amor, recomendaciones de producción o por el sentido del espectáculo que habría desarrollado la modelo dentro del dating show?, ¿por qué no eligió a Sebastián Carter, modelo y periodista con el que se entendía perfectamente dentro del encierro?...

Si ya estaba haciendo caridad, por qué no escogió al metalero de cartón que le escribía poemas de amor, quien a pesar de ser entomofóbico, le hizo un picnic al aire libre para demostrarle sus sentimientos…

¿Nuestra dama del verano 2008 alguna vez habrá tomado en serio el programilla? Mmm... dudoso, si recormdamos que al salir del claustro, de a poco le fue haciendo el manso-ni-que-NEXT! a Edmundo… Todo Chile fue testigo. O sea…

Pero, sí, calmao, esta entrada es para informarnos en qué está Cari hoy… Bueno, pues trabaja en Chilevisión, conduce el programa “Sinvergüenzas”, los domingos por la mañana, junto a otra niña igual a ella (versión crespa, +solarium y +chillona), Andrés Salfate y el gran Felipe Avello, quien básicamente se ríe todo el rato de nuestra ex princesa.

Las últimas noticias sobre Cari afirman que estaría embarazada de su nuevo pololo productor, el que conoció antes de entrar al reallity… ups...

Ah, y también podríamos destacar su nuevo color de pelo, unos tonos más bajo que el otrora rucio que llevaba. Quizá exprese el nuevo ciclo de su vida: ahora estudia psicología en la Universidad de Las Américas, tiene nuevo pololo con quién no descarta formalizar relación, conduce programa propio y espera a su próximo bebé.

La cuna de Cari

Llegó el momento de escribir sobre ella, Cari en sus inicios .

De hermosos ojos verdes, peliclaro teñido, signo géminis, importante estatura y medidas ideales, Cari fue escogida entre tantas chiquillas. Fue rescatada de la periferia de la Tv y la farándula criolla, para protagonizar el programa que jugó con los sentimientos de 20 homo chilensis.

Le gusta escuchar reggeton, cumbia y hardcore melódico, hablar de mecánica con hombres, tejer, hacer karting y visitar Fantasilandia.

La única aparición mediática previa de la modelo que valdría la pena mencionar, fuera de su ambiente discotequero y teams de verano, fue en “Morandé con Compañía”. Ahí se desenvolvió como una chiquilla más que sostuvo productos a enunciar en medio de los sketchs de Ché Copete.

Para entender a Cari hay que remontarse a su origen… Niña, se crió en el campo y tuvo una vida muy sufrida antes de llegar a la capital. A los 7 años su madre murió producto de un ataque al corazón, teniendo que mudarse a vivir con sus abuelos lejos de la urbe. Ya crecida, a los 18 años, Bastías dejó su hogar en la VIII Región para probar suerte en Santiago.

En la capital Carolina tomó el rumbo que quería en el mundo del modelaje y los eventos tipo K-mazú conociendo a varios de los amigos que hasta hoy mantiene.

En esta etapa Cari conoce a Álvaro Ballero, con quien tuvo una breve y tormentosa relación, "muy buena niña, muy buena pareja… Tuvo una carencia afectiva porque no conoció a sus viejos. La relación se volvió un poco más obsesiva, más complicada. Pero no es más que eso, es una muy buena niña", declaró Ballero, tratando de suavizar lo que había afirmado previamente a “Las Últimas Noticias": la muchacha era media friki, tipo controladora te-llamo y llámame-todo-el-día, con sus pololos, los necesitaba a su lado en todo momento, por eso la había pateado…

Actualmente, la linda Cari dice que ya olvidó a su padre. Este es un tema doloroso para ella. En general, en todas sus entrevistas, esquiva las preguntas sobre esta materia y su infancia. Al hacerse conocida, ex compañeros de su Liceo afirmaron que fue una niña maltratada por sus mayores, quienes aplicaron en ella una educación sumamente estricta, y no descartaron que haya recibido maltrato verbal y físico. Bastías siempre ha desestimado estas declaraciones.

Luego del éxtio del reallity, se destapó el rumor de que su anterior pareja la habría calzado con algunos dineros para poner un pub-retaurant de sushi que quebró. El pillo le pidió plata prestada a Cari, ganada con su sacrificio en los teams playeros, para emprender con su pyme. Nunca le pagó y se arrancó a Argentina. Esto nos confirma que Carolina sabe elegir a sus hombres con pinzas... Una razón más para haya sido nuestra primera bachelorette criolla.

Carolina Bastías: Todos íbamos a conquistarla...

Para inaugurar este blog, dedicado a los viudos de Carolina Bastías, participantes del primer dating show chileno “Amor Ciego”, nos referiremos al fenómeno “Cari la dama y los chilenos todos vagabundos” que intentaron conquistarla.

En esta entrada trataremos de respondernos por qué “Amor Ciego” alcanzó con el público los niveles de audiencia, seguimiento e identificación que todos sabemos.

En un país como el nuestro, caracterizado por tener una población mayoritariamente dejadita de la mano de Dios en materia estética, no debiese extrañarnos que el reallity en cuestión, así como todos los programas de la TV, tuviese entre sus militantes a una modelo preciosa.

Estuvo todo el verano en vitrina nacional. Fue acosada, amada, venerada, celada y odiada por 20 chilenos, como tú, como nuestros pololos, hermanos y padres, con la gran diferencia de tener una cámara siguiendo sus pasos todo el día.

Para que fueran “gente como uno” (GCU) tenían que ser feos… Porque en un país de no-necesariamente-lindos, todos llevamos un feo dentro. En el clóset. Un feo que quiere dejar de serlo, y por qué no, conquistar una hermosa chiquillo(a) de la TV en frente de todo el país, en horario prime.

Era más que morbo promedio. El nivel de expectación que teníamos todos ante el próximo capítulo en el que Bastías se decidiera por X o Y feo, era la proyección de nuestros humildes y genuinos anhelos, nuestro “querer ser” retratado en la TV.

Por esto cuando llegaron los nuevos concursantes modelos al reallity dominado por nuestros feos abundaron portadas y bloques en los programas de farándula que comentaron la lucha entre los hombres-normales y los mijitos-ricos por la rubia.

Todos íbamos a conquistarla, era la ilusión del dating show. Porque todos creemos merecer tener a alguien bello, educado y simpático como pareja. Cari supo que su público soñaba con esto, se vio ungida por ese rol en aquel momento histórico. La coacción de la Sociedad operó sobre ella. Por eso eligió a Edmundo y no a Sebastián (según un amigo mío lo hizo porque es maraca, pero bueno, son distintas versiones de la misma realidad).

Por eso también, una vez acabado el programa, lo abandonó para pasar a ser “sólo amigos” y encontrar un nuevo-y-mejor pololo... A ella también le faltaban sueños por cumplir.