Edmundo, Sólo para tiiii

De Edmundo Varas se ha dicho, escrito y mostrado mucho. Convengamos en que él tampoco es muy celoso de su vida privada… ¿Quién se acuerda de aquel chorizoy tierno mini galán que conquistó a la princesa delante todo Chile?, ¿recuerdan su inicial actitud? Quién lo viera y quién lo ve…

Varas quería ser futbolista, pero sufrió una lesión y no pudo seguir en carrera para ser profesional. Desde esa frustración hasta su entrada al reallity se sabe que sufrió grandes precariedades. Él declaró en su momento que no le había ido muy bien en el amor. He aquí la principal razón para ingresar al claustro del corazón.

Adentro hizo lo que quiso. Pataleó, sufrió, gozó, se enamoró, ofreció combos, pegó aletazos a sus adversarios. En fin. Era el centro de atención, el chileno promedio se identificaba con él, su entrega hacia Bastías y sus crisis de ira contra Soumastre.

También cantó: “Eres todo lo que quería, lo que mi alma vacía quería sentir… Tú has logrado encender cada parte de mi alma, cada espacio de mi ser. Ya no tengo corazón, ni ojos para nadie… Sólo para tiiiii, Sólo para tiiii, Sólo para tiiiii”

Mención honrosa, segunda en este blog, para el "Tranquilo papá" que le propinó a Felix Soumastre con toda la pachorra.

Cari lo eligió a él para luego despecharlo fuera de cámara, con un “veamos cómo pasan las cosas. No nos apuremos…”. Edmundo lloró en silencio, fuera de los sets de televisión (aunque se apareció por varios contando sus penas de amor).

Se propuso entrar a estudiar Kinesiología con el dinero que ganó en el programa (todavía no lo hace, ya sabremos por qué en la próxima entrada de este blog). Empezó a mantener a su familia. Estaba llegando la calma después de la tormenta, cuando apareció Francoise Perrot, la ex chica MeKano y se enamoró ciegamente…